La "black" ya existía, pero de la "White" no había oído hablar hasta ahora
La filial británica de Honda es muy dada a las series limitadas, algo que siempre le ha reportado muy buenas ventas. En estos días el CR-V enriquece su oferta con la introducción de dos ediciones especiales, "Black" y "White".
En ambas lo más destacable es el marcado carácter dinámico y el color utilizado en su carrocería y que da nombre a las ediciones. Además incluyen llantas de aleación específicas en negro, parrilla pintada, estriberas laterales, molduras plásticas decorativas, alerón posterior, cola de escape cromada y los cristales tintados.
En el interior las modificaciones son menores aunque la dotación es muy completa y no faltan el climatizador automático, sistema de navegación integrado, la cámara posterior, el bluetooth, control de velocidad de crucero, sensor de lluvia, sensores de parking o el completo ordenador de viaje.
De momento sólo para Reino Unido, se pueden solicitar tanto con motor de gasolina como en diésel, este último más interesante por su relación prestaciones-consumos (solo el de 150 CV; el 1.6 i-DTEC queda fuera).