Según recogen numerosos medios, la llamada a revisión afecta al mercado estadounidense:
Reguladores federales investigan quejas de frenado inesperado de Honda
Más de 1,7 millones de Accord sedán y CR-V están incluidos en la investigación
Los reguladores de seguridad federales están investigando el sedán Honda Accord 2018-2019 y el SUV Honda CR-V 2017-2019 tras 278 quejas de consumidores, que reportan que el sistema de frenado automático de emergencia (AEB) de los vehículos frena inesperadamente mientras se circula.
La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras (NHTSA) declara estar al tanto de seis colisiones con lesiones menores, que pueden estar relacionadas con este problema. Más de 1,7 millones de vehículos están incluidos en la investigación.
Los sistemas AEB están diseñados para detectar vehículos y otros obstáculos, y reducir automáticamente la velocidad de un vehículo para evitar o minimizar la gravedad de una colisión. Se ha demostrado que AEB reduce los accidentes y salva vidas y la mayoría de los automóviles nuevos incorporan esa tecnología.
Sin embargo, las quejas que recibió la NHTSA sobre el Accord y el CR-V dicen que estos eventos inesperados de frenado ocurren "sin previo aviso y al azar" y, a veces, involucran "grandes cambios de velocidad", incluso cuando nada bloquea el camino. Cuando esto sucede, la NHTSA dice que los conductores corren un mayor riesgo de verse involucrados en una colisión por alcance.
El portavoz de Honda, Chris Martin, dijo en un correo electrónico que el fabricante de automóviles "cooperará con la NHTSA durante el proceso de investigación y continuaremos con nuestra propia revisión interna de la información disponible".
Nissan también está bajo investigación por problemas de frenado similares, y Mazda emitió un retiro del mercado por un problema similar en 2019. NHTSA está investigando a Tesla por un fenómeno conocido como "frenado fantasma", cuando el vehículo frena repentinamente mientras el sistema de asistencia al conductor Autopilot está activo.
Durante una investigación de defectos, la NHTSA obtiene información del fabricante de automóviles, que también puede presentar sus propios argumentos relacionados con el posible defecto. NHTSA dice que la mayoría de las investigaciones de defectos se cierran dentro de los 12 meses, ya sea porque el fabricante decide realizar un retiro o porque NHTSA decide que no hay ningún defecto relacionado con la seguridad. A veces tardan más, incluso cuando la investigación del defecto requiere un análisis más detallado. La investigación por frenadas involuntarias en vehículos Nissan, por ejemplo, está abierta desde 2019.
Un retiro ocurre cuando un fabricante de automóviles o la NHTSA descubre un defecto de seguridad que debe corregirse o descubre que un vehículo no cumple con los estándares de seguridad federales. Estos defectos a menudo salen a la luz después de las quejas de los consumidores. Aprenda cómo reportar una queja de seguridad a la NHTSA. Según NHTSA, la mayoría de los retiros son iniciados por fabricantes de automóviles sin ninguna participación de la agencia.
Fuente: https://www.consumer...ts-a9281526240/
