De toda la vida de Dios, el último apreton lo dabas echando el cuerpo en peso encima de la llave de tuercas, no existian ni llaves dinamonoseque, y el unico par que habia era de webs, y en cada viaje de poco mas de 200 km, un pinchazo tenias garantizado.
¡¡¡ Nos estamos amariconando !!!
hombre... lo de amariconando... no se.. Pero me joderia pasarme de vueltas y cargarme algo. Asi que prefiero gastar en una llave de estas que despues reparar el daño y encima quedarme sin coche un tiempo